Los Fantasmas Del Real - La leyenda.

Dicen, y yo he escuchado, que a éste grupo se le ha visto algunas veces, precisamente en la ciudad que lleva su nombre, y que como fantasmas que son, sólo se les miraba en la noche, desapareciendo con los primeros rayos del sol en las mañanas, además de que cuentan, que son los lamentos que tocaban, muy nacionales, y cuando no, al menos si muy latinoamericanos, y que son hasta donde me han contado, originarios, uno de Monclova, y el otro de Lerdo, Durango. Que se conocieron en la ciudad de Saltillo, cuando estudiaban ambos en la escuela de música de la Universidad Autónoma de Coahuila, y que desde entonces teniendo en común su amor por la música, los dos fantasmas compartieron un sin número de vivencias, unas buenas, otras malas, y muchas otras mejores, para un día, en que viajando y penando, llegaron a Real de Catorce, en la entidad federativa de San Luis Potosí, lugar en el que formaran el grupo del que hoy les hablo. Y fue en aquel pueblo maravilloso, y tras el curso de algunas semanas de reconocerlo y disfrutarlo, en el que dejaron prendadas sus viajeras almas, las cuales al menos en parte, quedaron plasmadas en un disco desenchufado, que un amable turista, provisto de una computadora portátil, les ayudó a grabar; y se llamó "Fantasmas Del Real", "En vivo Real De Catorce".
Más todo sueño se acaba, y tarde que temprano, nuestros amigos tuvieron que volver a casa, cada uno a su lugar de origen; sin embargo, a su regreso, Beto e Isaac, no volvieron por entero, porque allá, en Real De Catorce, dejaron merodeando sus fantasmas.
Hoy en día, la realidad es que no se sabe cuando se les vuelva a ver juntos, pero estense alertas, que andan rondando los bares, y cualquier día de estos les dan el susto, perdón… quise decir: el gusto.